domingo, 22 de septiembre de 2013

Quema de "Llamara(u)das" en Salamanca


Ayer sábado día 21 de septiembre la gran G. de Nanoediciones realizó en el patio de la Casa de las Conchas de Salamanca una lectura incendiaria de las "Llamara(u)das", la colección de relatos hiperbreves publicada hace poco más de un año.




Fue una verdadera lástima no poder estar en esa II Muestra de Editores Inclasificables, no poder ver cómo la gran G. esquivaba turistas alemanes, cómo encendía una cerilla antes de leer cada uno de los hiperbreves, cómo iban ardiendo los textos, cómo conseguía que el olor a quemado impregnara el patio de la Casa de las Conchas.

  


La capilla ardiente (casi apagada ya) de las "Llamara(u)das" se instaló en el pozo del patio, cerrado con un candado para que nadie pueda arrojar monedas a cambio de deseos. 

Sin embargo, el mío sí se cumplió. 
Y sin necesidad de echar moneda alguna.



Si os apetece leer lo que ayer quemaron en Salamanca podéis descargar los dos cuadernillos con los textos y la caja contenedora y construir fácilmente vuestro propio libro-objeto. Y, si os apetece, arrojarlo a las llamas después de haberlo leído.

4 comentarios:

Miguel Ángel Pegarz dijo...

1. Yo no pude estar en el acto, aunque estuve hablando con @Nanoediciones de ti y del proyecto.
2. Los turistas alemanes entran poco en La Casa de Las Conchas, poca gente sabe apreciar su patio, se quedan en la fachada. Craso error.
3. No necesitan abrir el pozo, porque es un lugar mágico de por sí, con una sala con lámparas de seta verdes que inspiran en el Taller de Escritura que da el gran Raúl Vacas.
4. Tengo bien empaquetadito mi Llamara(u)das, esperando a tener un momento de calma para abrirlo y leerlo.

Víctor dijo...

1. Yo tampoco pude estar en Salamanca, aunque me contaron que te vieron ahí.
2. Los turistas ilerdenses tampoco sabemos apreciar su patio. Estuve allí (poco tiempo, esos sí) y me quedé sin visitarlo. Craso error.
3. La próxima moneda que lance a un pozo irá acompañada del deseo de (re)visitar Salamanca como es debido.
4. Espero que te guste, Miguelángel. Y si no te gusta, siempre puedes quemarlo.

Un abrazo.

Belkys Pulido dijo...

Nos quejábamos por la quema de libros, en otras épocas. Cierta literatura ardiendo, silenciada y ahora lo hacemos de puro gusto. Raros caminos toma hoy la promoción de la lectura ...No obstante, también quiero ir a Salamanca, de seguro sin cerillos

Víctor dijo...

No sabes la alegría que da, Belkys, escribir algo y luego quemarlo. Creo que incluso purifica. Un abrazo y gracias por pasar por aquí.